El jockey brasilero y Vílchez fueron acusados por el delito de homicidio doblemente calificado por mediar promesa remuneratoria y el uso de arma de fuego; en tanto que a Lorenzetti se le agregó el agravante de la existencia del vínculo porque era el marido de la víctima.
La requisitoria fiscal es extensa –son 164 fojas o páginas-, pero no deparó sorpresas para los defensores del trío imputado, según pudo saber SanLuis24.
Romina Aguilar fue asesinada a fines de enero de 2016. Según la declaración espontánea del brasilero, él y Vílchez asesinaron a la joven a pedido de Lorenzetti y a cambio de una suma de dinero que rondó los cien mil pesos.
Dice el fiscal en su escrito: "De las diferentes constancias reseñadas anteriormente surge de modo indubitable el plan elaborado a partir de la conducta inicial de LORENZETTI, quien encontrándose en un contexto familiar sumamente problemático con su pareja, de peleas, engaños, celos, y amenazas con hacer publicas ciertas situaciones que a la postre perjudicarían la imagen hacia el exterior de quien fuere una persona publica de conocimiento en la comunidad, ideó el método a efectos de resolver el ´problema´ existente e insostenible con su mujer, prometiendo una suma de dinero, a priori cien mil pesos, a dos personas, EDIVALDO DE OLIVEIRA PEREIRA y CRISTIAN LEANDRO VILCHEZ, a efectos de cometer el asesinato de su mujer, el cual debía ocurrir en el momento exacto en el cual la victima se encontrare sola, vulnerable, realizando el mismo en un contexto de un supuesto robo, para así disipar cualquier sospecha que pudiera caber sobre él, pergeñando el mismo LORENZETTI estar situado en la escena del crimen como si fuera una mera casualidad, intentando plasmar a posterior la imagen de un esposo compungido por la situación; Que en dicha inteligencia de despistar a quienes se encontraban a cargo de la investigación, se mostro como un afable colaborador de la justicia, presentándose por ante los estrados judiciales con un pedido de AVOCAMIENTO, efectuando apariciones publicas por ante cualquier medio de comunicación le fuere posible, resaltando el ´devoto amor´ por quien fuere su esposa, aprovechando para machacar a quienes fueren sus contendientes electorales, y ubicándose de ese modo en posición de victima de todo lo que estaba ocurriendo…aristas que resaltan un perfil psicótico, pero claramente conciente de las consecuencias existentes de sus actos".
Así, el acusador abona la hipótesis de que el suspendido intendente de La Calera mandó a matar a su esposa para que no difunda las actividades delictivas que desarrollaba y desecha la otra, la política, en la que el viudo apuntó a Alberto Leyes como involucrado en el asesinato por su rivaldiad política, primero, y por ser el supuesto padre de Romna, después.
Fuente: www.sanluis24.com.ar
