| Foto archivo NotiNogo |
Esta vez, el damnificado fue un vecino de la ciudad de San Luis que frecuenta Nogolí todos los fines de semana, ya que posee una casa de descanso.
El hombre circulaba por la avenida principal del pueblo, por uno de los tantos sectores donde no existe iluminación pública, cuando se le cruzó un animal vacuno de color negro.
Después de golpearse contra un costado del automóvil Fiat Siena, la vaca huyó por dentro de unos terrenos baldíos.
Según confirmaron fuentes policiales, el auto sufrió abolladuras en el capó, guardabarros y puerta del acompañante, rotura de una óptica y trizadura del parabrisas.
La Policía aún no determinó a quien podría pertenecer el animal.
¿Quién le pone el cascabel al gato?
Es habitual que animales vacunos, equinos y caprinos deambulen por la zona urbana del pueblo, lo que genera constantes reclamos de vecinos que no sólo advierten el peligro que representan para los transeúntes, sino que también se ven afectados por los múltiples problemas que ocasionan, tales como roturas de cañerías, mangueras y plantas, entre otras molestias que conlleva la costumbre que muchos pobladores trasladaron desde la zona rural a la urbana trasformado los patios o terrenos baldíos en corrales, produciendo problemas extras como reproducción de vectores y malos olores.
En muchos casos, los dueños de los animales ya no poseen grandes exenciones de tierra, y al mudarse a pequeñas propiedades en la zona urbana pretenden vivir como en el campo, rodeados de ganado menor y mayor que suelen liberar en la vía pública para que se alimenten de lo que encuentran, a sabiendas de que está prohibido. Incluso no los marcan ni señalan con toda la intención de no responsabilizarse por los daños o molestias que puedan ocasionar a terceros.
Hace varios años que en la Provincia existe distintas normas que prohíben estas costumbres sin embargo, el cumplimiento es prácticamente nulo.
Curiosamente, el Gobierno dice que Nogolí tiene un gran potencial turístico sin embargo nada hace para brindarle seguridad jurídica a los inversores que ven como pasan los años y no se resuelven problemas tan elementales como éstos.
La Policía, al igual que las autoridades del Ministerio de Seguridad aducen que la Municipalidad no colabora para efectivizar el cumplimiento de la Ley que prohíbe dejar los Animales Sueltos. Desde la Municipalidad también ponen excusas a la hora de ordenan la convivencia urbana en general, dejando a vecinos y turistas librada su suerte al azar.
Hasta el día de hoy, no hay normativa local que regule el tema o adhiera a las leyes provinciales pero eso sí, de la ordenanza tarifaría para aumentar las tasas y servicios (escasos o nulos), ningún intendente se olvida de presentarla cada año con sus correspondientes modificaciones (de costo, nunca de forma).
